miércoles, 21 de enero de 2009

Obama anuncia medidas a favor de la transparencia y la ética en su Gobierno


AUSTERIDAD EN LOS EEUU
WASHINGTON.- El presidente de EE.UU., Barack Obama, suscribió hoy una serie de órdenes ejecutivas para regular el comportamiento ético de su administración, entre las que figura la congelación de los salarios de los funcionarios mejor remunerados."La transparencia y el Estado de Derecho serán la base de mi Presidencia", aseguró Obama en la ceremonia de firma, en la que prometió "una nueva era de apertura" en su país.Entre las medidas suscritas por Obama en su primer día de trabajo figura una orden para congelar el sueldo a los funcionarios de la Casa Blanca que cobren más de 100.000 dólares -aproximadamente un centenar de ellos-, en momentos en que el país atraviesa una dura crisis económica."Las familias se están apretando el cinturón, y lo mismo debe hacer Washington", sostuvo el nuevo mandatario, que juró su cargo el martes.Obama anunció también una medida para fomentar la transparencia del Gobierno, que exigirá que todos los organismos gubernamentales vean las peticiones de información que se les presenten bajo la Ley de Libertad de Información."La Ley de Libertad de Información es la herramienta más poderosa que tenemos para hacer que el nuestro sea un Gobierno honesto y transparente", declaró el nuevo mandatario.Los funcionarios "no sólo tendrán que obedecer su letra, sino también su espíritu", insistió Obama, quien arremetió contra las prácticas "de excesivo secreto" de la administración anterior, que -dijo- "si había un argumento plausible para no proporcionar información, no la daba".El recién estrenado presidente suscribió también una orden ejecutiva que establece rígidos límites a los cabilderos, aquellos que representan los intereses de grupos de presión o de empresas ante las entidades políticas.A partir de ahora los cabilderos no podrán ocupar puestos del Gobierno relacionados con áreas que ellos hayan representado durante los últimos dos años.Tras ocupar un cargo en la Administración, no podrán pertenecer a un grupo de presión hasta que Obama haya dejado la Presidencia, ni podrán intentar ejercer influencia sobre sus ex colegas durante dos años.Los cabilderos en ejercicio no podrán, por su parte, hacer regalos a los funcionarios públicos.El servicio público "es un privilegio" y no debe "servir para ayudar a los amiguetes, a los intereses de las empresas o para promocionar un programa ideológico", sostuvo el jefe de la Casa Blanca, en otra aparente crítica al Gobierno de George W. Bush.Durante la campaña electoral, Obama había prometido tomar medidas contra la influencia de los grupos de presión sobre el Gobierno.